Al momento de hacer remodelaciones, las personas están tan concentradas en las instalaciones eléctricas, tuberías, aires acondicionados, entre otros, que suelen olvidar cómo se verán estas al final del proceso. En muchos casos, el resultado no es agradable visualmente, pero muchas personas, con el fin de evitar que estas terminaciones queden expuestas y a la vista de todos, utilizan emparrillados de cielo raso como un techo falso para cubrirlas.
Sin embargo, cabe mencionar que los emparrillados no se utilizan únicamente para ocultar diversas instalaciones; también aportan múltiples beneficios, como la mejora de la iluminación, protección y, naturalmente, una mejor decoración. Son productos polivalentes, disponibles en una amplia gama de diseños que pueden adaptarse a diferentes ambientes. Debido a su especialización, solo se pueden adquirir en empresas especializadas en construcción, como HOPSA.
En Panamá, los emparrillados de cielo raso gozan de gran demanda, por lo que es vital conocer qué funciones desempeñan, los beneficios que brindan y los aspectos a considerar al seleccionarlos.
Emparrillados para cielo raso: ¿cuál es su propósito?
El emparrillado para cielo raso es una estructura de metal, comúnmente elaborada con acero galvanizado o aluminio, compuesta por varios perfiles que se ensamblan formando una rejilla.
Pero ¿qué se hace con esta cuadrícula? Se suspende del techo original, la misma funciona como una especie de soporte para distintos tipos de acabados, por ejemplo, paneles acústicos, placas de yeso, sistemas de iluminación o tejas decorativas.
Los emparrillados tee para cielos rasos son sumamente versátiles y se utilizan para una amplia gama de soluciones en el ámbito de la construcción, destacando las siguientes:
- Ocultar instalaciones: se emplean para mantener fuera de la vista las instalaciones de tuberías, cables y sistemas de ventilación, entre otras cosas, mejorando así la estética general.
- Aislamiento: el emparrillado permite crear un techo falso, generando un espacio intermedio con el techo original. Este espacio se utiliza para colocar material aislante, mejorando el aislamiento tanto acústico como térmico.
- Protección: dada su capacidad aislante, en situaciones de incendio, los emparrillados ayudan a retardar la propagación del fuego y a proteger las instalaciones subyacentes.
- Iluminación: permiten la creación de efectos de iluminación personalizados al incorporar sistemas de iluminación. Según las preferencias, esta integración puede ser tanto directa como indirecta.
- Acabados: están disponibles en múltiples acabados, haciéndolos aptos para variedad de entornos, desde la formalidad de una oficina o consultorio hasta espacios más elegantes y acogedores.
¿Qué aspectos considerar al seleccionar el emparrillado adecuado para cielo raso?
Los emparrillados para cielos rasos presentan diversas características que los hacen adecuados para espacios específicos. Hay ciertos factores que ayudan a determinar la elección correcta, como el tipo de material o la carga que deberán soportar. Algunos ejemplos incluyen:
- Material: los más comunes son el acero galvanizado y el aluminio. Este último es ligero y fácil de manejar, mientras que el acero galvanizado ofrece mayor resistencia.
- Tipo de perfil: no todos los emparrillados son idénticos; cada uno posee características y usos específicos.
- Distancia entre los perfiles: esta puede variar, dependiendo del tipo de acabado deseado y de la carga que deba soportar.
- Carga: es recomendable calcular la cantidad de peso que podrá soportar.
- Acabado: estos pueden ser visibles u ocultos. Los visibles ofrecen un aspecto más estético, mientras que los ocultos permiten una mejor integración con el techo.
- Aislamiento: es esencial considerar el aprovechamiento del espacio entre el emparrillado y el techo para emplear materiales ininflamables o para reducir el ruido.
- Iluminación: en caso de querer incorporar sistemas de iluminación, no todos los emparrillados son adecuados. Antes de adquirirlos, lo ideal es confirmar si los perfiles son compatibles.
HOPSA en Panamá: emparrillados de cielo raso para construcciones robustas
La popularidad de los emparrillados para cielos rasos se debe a su versatilidad, adaptándose a una gran variedad de diseños y ambientes; su instalación es sencilla; ofrecen fácil acceso a las instalaciones para tareas de mantenimiento, además de ser duraderos, y permiten una limpieza rápida y sencilla.
Existen numerosos factores a considerar al elegir un emparrillado para cielo raso: el material del techo original, la necesidad de un aislamiento específico o simplemente la coherencia estética con el entorno, entre otros. Por ello, es esencial acudir a empresas especializadas como HOPSA, donde es posible encontrar emparrillados en diversas medidas y modelos.
Para obtener más información, explorar las opciones disponibles o realizar consultas personalizadas, se pueden encontrar los detalles pertinentes en el sitio web de HOPSA.